Este no es un artículo ya publicado en la web de Agencia de Aprendizaje. Mi anhelo (hoy he «aprendido» esta palabra) es publicar más a menudo en esta página.
Una de las felicidades que me llevo de este año 2015 es el haber profundizado en el conocimiento de personas que han ido apareciendo en mi entorno a partir de encuentros por motivos de mi acción profesional, de mi formación u otros más sociales o familiares. En la mayoría de los casos aun no hay profundidad y queda mucho recorrido por delante.
Tengo la sensación de que estoy más receptivo, más abierto que antes. Tal vez, a fuerza de comentarlo, se me ha pegado algo de lo que enseño a los demás sobre la escucha activa, empatia y asertividad.
La verdad es que me siento más rico que antes. He crecido a partir de las conversaciones formales e informales que he mantenido siendo alumno, maestro, consultor, mentor, socio, cliente, casero, vecino, promotor, paciente, compañero, amigo, pareja, padre, …
Cantidad de roles que desempeñamos en nuestra vida. Simultáneamente, periódicamente, progresivamente o …
Todos conllevan relación con personas de las cuales podemos aprender si así lo queremos.
Y también por supuesto, enseñar. Compartir con ellas todo lo que hemos aprendido. ¿De que sirve la experiencia si no la compartimos?
Vivir en voz alta. Dar a conocer nuestros sentimientos, nuestras experiencias, nuestras opiniones, explicar como hemos conseguido nuestros conocimientos, … compartir
Gracias: Francesc, Carlos, Ramon, Marc, Caterina, Diegos, Sergio, Josés, Tonis, Esther, Rosa, Montse, Carme, Vicenç, Carol, Jorge, Lilian, Rafa, Cristinas, Bilyana, Antonias, Jaimes, Miquels, Gabriel, Claras, Catalina, Pedro, Martin, Xisca, Paquita, Marias, … Rosamaria, Núria, Marta, Joana. No estais todos en esta lista y muchos sois anónimos para mi pero de todos me va quedando algo.
Cuento con vosotras para este 2016 y, bueno, ya sabéis en que podéis contar por mi parte